Era la última en colectivo, el conductor paró en un baldío, cerró las puertas e intentó someterla.


Una joven de 18 años ayer vivió una siesta de terror en el interior de un colectivo de la empresa Acaraymi, en el barrio Remansito, de Ciudad del Este. Eran las 13:00, F.A.MC, estaba regresando a su casa, tras dejarle a su hermanita en la escuela. 


Faltando varias cuadras para llegar a su vivienda, se dio cuenta de que era la última pasajera a bordo del coche N° 46, chapa N° BFT 265, del Acaraymi, y el chofer empieza a hacerle insinuaciones sexuales. 


El acoso iba subiendo de tono hasta que el colectivero pasó su parada y se fue hasta un terreno baldío con la intención de someter a la chica, según denunció.


Gilda Portillo, abogada de la víctima, relató a los medios locales que el chofer procede a trancar el molinete, cierra la puerta y comienza a manosear e intentar besar a la estudiante. “Ella pidió auxilio a los vecinos. Cuando logra escapar, se va a contarle a su hermano y detienen al chofer”, dijo la abogada. 


La víctima ya declaró ante la Fiscalía y piden una imputación contra el señor por coacción. El hermano de la joven y la prima lograron agarrar y entregar al conductor, de nombre José Antonio Cantero. Está detenido, a disposición del fiscal Luis Fernando Escobar.


FUENTE: EXTRA