El accidente de tránsito ocurrido semanas atrás sobre la Ruta PY06, a la altura del kilómetro 18 del distrito de Capitán Miranda, continúa generando fuerte preocupación e indignación ciudadana, pese a que el adolescente involucrado ya fue imputado por la presunta comisión del hecho punible de exposición al peligro en el tránsito terrestre. La causa se encuentra a cargo de la unidad fiscal encabezada por la abogada Griselda González, aunque hasta el momento se percibe un escaso avance investigativo.

El hecho involucró a una motocicleta y una camioneta conducida por un adolescente de 17 años, hijo del intendente de Nueva Alborada, Óscar Martínez. A raíz del impacto, tres personas resultaron lesionadas: Celina Duré Sánchez, de 34 años, conductora de la motocicleta y sus dos hijos menores, de 2 y 11 años. El menor que conducía la camioneta salió ileso.

De acuerdo con la declaración del adolescente, este no habría visualizado la motocicleta al intentar cruzar la ruta, produciéndose la colisión en la parte trasera derecha del vehículo de mayor porte. Tras el accidente, ambos rodados fueron trasladados a la comisaría jurisdiccional, donde se realizaron los procedimientos correspondientes, incluido el alcotest al menor, cuyo resultado fue negativo.

Si bien ya existe una imputación formal contra el adolescente, el caso sigue generando cuestionamientos, considerando que la normativa paraguaya prohíbe terminantemente que menores de edad conduzcan vehículos. Esta situación expone no solo al conductor, sino también a sus tutores legales a eventuales responsabilidades penales y administrativas.

El escenario se torna aún más grave debido a las informaciones que surgieron durante el proceso investigativo. El vehículo involucrado es una camioneta Toyota Fortuner, color negro, año 2010, que habría ingresado supuestamente de manera irregular desde el Brasil por la zona de Salto del Guairá. Llamativamente, el número de chapa DPJ 145, no figura en el Registro Único del Automotor.

De forma extraoficial, también se maneja la versión de que el rodado habría sido robado en Brasil y que en Paraguay supuestamente contaba con un oficio de depositario judicial, que aparentemente sería apócrifo. De confirmarse estas sospechas, el caso adquiriría una gravedad extrema, superando ampliamente el ámbito de un accidente de tránsito común.

Ante estos elementos, no se descarta que la imputación se amplíe e incluya al padre del adolescente, el intendente de Nueva Alborada, Oscar Martinez, atendiendo a su rol como tutor legal. Mientras tanto, la ciudadanía continúa exigiendo transparencia, avances concretos en la investigación y la aplicación de la ley sin privilegios.