Esta postergación se suma a las demoras que la familia ya había denunciado previamente, incluyendo la suspensión de la primera audiencia preliminar en febrero de 2024. La noticia de hoy representa un duro golpe para Rafael Servián y Mirta Ferreira, abuelos de los niños, y para Noelia, quienes han asumido la responsabilidad de su cuidado y han luchado incansablemente por obtener justicia para Carmen.

La familia Servián, que se encuentra evaluando la posibilidad de migrar a Argentina ante la falta de apoyo estatal para la manutención de los niños, ve cómo esta nueva demora judicial añade aún más incertidumbre a su futuro.

La noticia genera una profunda preocupación en la familia y en los grupos de apoyo que acompañan el caso. Exigen a las autoridades judiciales la mayor celeridad y transparencia en el proceso, recordando la urgencia de brindar justicia a Carmen y garantizar un futuro digno para sus tres hijos, víctimas colaterales de este brutal crimen.

La esperanza de la familia de presenciar hoy el inicio del juicio oral se desvanece, dejando en su lugar una renovada sensación de desamparo y la incertidumbre de cuándo finalmente podrán encontrar la justicia que tanto anhelan.