La cúrcuma es, sin duda, un aliado valioso para potenciar la salud, pero su consumo debe ser responsable.


La cúrcuma, conocida como el “oro indio”, es una especia milenaria que ha ganado popularidad por sus múltiples beneficios para la salud. Utilizada tradicionalmente en la medicina ayurvédica y como ingrediente estrella en la cocina, su consumo moderado puede aliviar diversas dolencias, pero su uso inadecuado podría tener consecuencias negativas.



Según la licenciada Cecilia Larán, técnica del Instituto Nacional de Alimentación y Nutrición (INAN), la cúrcuma es un potente antiinflamatorio natural que contribuye a la digestión, mejora la calidad del sueño y beneficia órganos vitales. “Se recomienda consumirla media hora antes de dormir, ya que ayuda a conciliar el sueño”, indicó a la radio 650 AM. Además, esta especia es rica en antioxidantes y se asoció con el fortalecimiento del sistema inmunológico y la prevención de enfermedades crónicas.


La forma más común de consumo es en infusiones. Para prepararla, la especialista recomienda utilizar una pequeña porción: “Medio centímetro de cúrcuma fresca en un litro de agua es suficiente para aprovechar sus beneficios sin excederse”.


El peligro del exceso


Sin embargo, su creciente popularidad llevó a muchas personas a consumirla en dosis incorrectas, lo que podría provocar efectos adversos. “El problema es que la gente no mide y consume cantidades excesivas”, advirtió Larán. Un exceso de cúrcuma puede causar la formación de cálculos renales debido a su alto contenido de oxalatos, además de irritar el tracto gastrointestinal.


Por ello, la licenciada recomienda moderación y un consumo repartido a lo largo del día para evitar sobrecargar el organismo. “Muchas veces nos sobrepasamos, como con cualquier alimento. Es fundamental administrar bien las dosis”, señaló.


Recomendaciones para su consumo


Para disfrutar de los beneficios de la cúrcuma sin riesgos, enfatiza la importancia de seguir estas pautas:


1. Porciones limitadas: No exceder la cantidad sugerida (medio centímetro por litro de agua en infusiones).


2. Normas de higiene: Siguiendo las pautas de higiene alimentaria disponibles en la página del INAN.


3. Consumo consciente: Consultar a un profesional de la salud antes de incorporar suplementos de cúrcuma, especialmente si se padecen afecciones como cálculos renales o problemas hepáticos.



FUENTE: HOY