En la noche de ayer, fue encontrado el cuerpo sin vida de un adolescente de 16 años que había caído al Río Paraná días atrás, tras el hundimiento de la embarcación en la que trabajaba como "pasero". El trágico suceso ocurrió el pasado viernes 25 de octubre, en la zona de Mayor Otaño.

Tras intensas labores de búsqueda que involucraron a las autoridades y a la comunidad local, el cuerpo del joven fue localizado. El médico forense Dr. Cándido Vargas Colman realizó la inspección del cadáver y determinó que la causa probable de muerte fue asfixia por sumersión.

La identificación del cuerpo fue realizada por Claudio Alcides Cuenca Riveros, quien confirmó que se trataba de su hijo, el adolescente desaparecido. Esta situación ha conmocionado a la comunidad, que ha expresado su dolor y solidaridad con la familia en estos difíciles momentos.

Las autoridades continúan investigando las circunstancias que rodearon el accidente, y se espera que se tomen medidas para prevenir futuros incidentes en la zona, donde la navegación y la actividad pesquera son comunes. Este trágico acontecimiento resalta la importancia de la seguridad en las actividades acuáticas, así como la necesidad de contar con medidas de protección adecuadas para los jóvenes que trabajan en estas condiciones.