La comunidad de Encarnación se une para restaurar el puesto de ventas de la abuelita de 94 años, devastado por un incendio intencional.


El conmovedor caso de Doña Lidia, una abuelita de 94 años, ha captado la atención de todo el país tras el devastador incendio que arrasó con su pequeño puesto de ventas en la ruta PY06 de Encarnación. La casilla, donde Doña Lidia vendía productos elaborados con dedicación y cariño, fue completamente destruida por el fuego provocado por delincuentes.


En respuesta a esta injusticia, la comunidad local ha demostrado una admirable solidaridad. Este viernes, un grupo de vecinos liderado por el docente Lucas Acosta comenzó la reconstrucción del puesto, con el propósito de proporcionar a Doña Lidia un nuevo espacio seguro para continuar con su labor. Con el apoyo de su comisión vecinal y mediante una recaudación de fondos organizada a través de un grupo de WhatsApp, se lograron obtener los materiales necesarios, como maderas y chapas.


La obra de reconstrucción comenzó el viernes y avanzó hasta el lunes, cuando se ultiman los detalles para entregar el renovado puesto de ventas a Doña Lidia. Mientras tanto, la abuelita ha mantenido su espíritu resiliente, improvisando un pequeño puesto de comidas para no interrumpir su actividad.


Emocionada y profundamente agradecida, Doña Lidia ha recibido apoyo no solo a nivel local, sino también de la comunidad internacional. Su historia es un testimonio inspirador de cómo la solidaridad y el amor comunitario pueden superar incluso las adversidades más difíciles. Hoy, la abuelita nos espera en su renovado puesto de comidas, un verdadero símbolo de esperanza y unidad.