La contracción de 3,1% que registró el IMAEP en junio de este año se debió a la menor actividad de la agricultura, la ganadería, la construcción, algunas ramas de la manufactura y los servicios, según informó el BCP.


La nota positiva se dio hacia finales del primer trimestre, con el mejoramiento de las condiciones climáticas que favoreció a la producción de soja zafriña y maíz, mientras que la generación de energía eléctrica logró crecer.

El Índice de Actividad Económica del Paraguay (Imaep), medido por el Banco Central del Paraguay (BCP), anotó en junio del 2022 el quinto mes consecutivo de caída, con una contracción de 3,1% respecto a junio del 2021. 

De esta manera, el indicador acumula una merma de 3% desde enero y el desempeño del segundo semestre deberá ser distinto al de estos últimos meses para revertir la tendencia y lograr el crecimiento de 0,2% del producto interno bruto (PIB) que pronostica la banca matriz para el cierre del 2022

El resultado negativo del sexto mes del corriente año se produjo por la menor actividad de la agricultura, la construcción, la ganadería, una parte de las manufacturas y los

servicios. Por su parte, el resultado positivo de la generación de energía eléctrica atenuó la caída de la actividad económica, explica el BCP.

En cuanto a la situación de la agricultura, el reporte del Banco Central recuerda que la fuerte sequía que golpeó al campo entre finales del 2021 e inicios del 2022 produjo considerables pérdidas en la cosecha de soja y otros productos. 

Sin embargo, destaca que, a partir de finales del primer trimestre del 2022, las condiciones climáticas mejoraron “notablemente”, favoreciendo a los cultivos de la soja de entrezafra (comúnmente denominado zafriña) y maíz. Esto llevó a menores caídas de la producción agrícola, conforme a los últimos datos proveídos por el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), detalla la entidad.

Por otro lado, la generación de energía eléctrica de las binacionales verificó una dinámica interanual positiva, debido a la mejora registrada en el caudal hídrico del río Paraná.

Sobre la construcción, sostiene que la caída interanual de junio se debió a un menor ritmo de ejecución de las obras tanto públicas como privadas. Mientras tanto, la ganadería registró un desenvolvimiento interanual  negativo que respondió al menor faenamientos de bovinos y porcinos.

Dentro de las manufacturas, las actividades que incidieron negativamente fueron la producción de aceites, carnes, molinerías y panaderías, lácteos, metales comunes, productos metálicos y minerales no metálicos. Estos resultados fueron mitigados por las variaciones positivas registradas en la producción de azúcar, bebidas y tabacos, químicos, productos del papel, textiles y prendas de vestir, cueros y calzados, y maquinarias y equipos, agrega el informe de IMAEP.

En los servicios, hubo desempeños positivos en la actividad comercial, los servicios a las empresas, restaurantes y hoteles. Sin embargo, mostraron resultados negativos los servicios gubernamentales, servicios a los hogares, transportes, intermediación financiera, telecomunicaciones y servicios de información.

Finalmente, el IMAEP sin agricultura ni binacionales registró una variación interanual de -1,9% y, con este resultado, acumula un crecimiento de 1,7% en lo que va del año.

Fuente: Marketdata